Botikazar Indiarekin

Podemos decir que de una pequeña charla en una pequeña clase, surgió un gran proyecto realizado por grandes personas.

Todo comenzó en nuestro primer curso de bachillerato, cuando desde Fundación Vicente Ferrer vinieron a presentarnos su obra en una charla que parecía que se iba a quedar ahí.

Poco después, nos dieron la oportunidad de participar en el proyecto "School to school", para poder mandar información de nuestra escuela a una de allí, y poder recibir de ellos su información.

Antes de finalizar el 2010. nos dieron la oportunidad de participar en la Gala Benéfica de Navidad celebrada en el Palacio Euskalduna, donde cuatro de nuestros alumnos realizaron una lectura ante un auditorio principal lleno.

Con el nuevo año, desde la fundación nos brindaron la oportunidad de participar en un proyecto más solido: un proyecto de bicicletas. Conseguimos recaudar dinero para comprar 16 bicicletas que irían destinadas a niñas que las necesitaban para poder acudir al instituto.

Acabando el curso, Sasi nos visitó, y le dio una idea un tanto descerebrada a nuestro profesor Iñaki Valencia: un instituto de Andalucía había realizado un proyecto con el que habían visitado la fundación...ahí comenzó lo "bueno".

Antes de entrar en nuestras ansiadas vacaciones de verano, nos fue concedido el VIII. Premio Francisco Javier Landaburu Civis gracias a un proyecto que desarrollamos sobre el "Año Europeo del Voluntariado". El premio era un viaje por Europa para conocer las Instituciones Europeas.

Después de un intenso verano, comenzamos el curso disfrutando el premio que recibimos el curso anterior, y abriendo la puerta a un futuro viaje: Anantapur, India.

Reflexionando mucho, decidimos embarcarnos en tal proyecto, y tras mucho trabajar para recaudar dinero y así financiarnos parcialmente el viaje, en Junio, ya terminada la Selectividad, ahí estábamos, en Anantapur, en la sede de Fundación Vicente Ferrer.

Tras una experiencia inigualable, volvimos a Bilbao y no queríamos que la cosa se quedará ahí, por lo que decidimos escribir un libro con nuestras experiencias: "Yo no monté en Ricksaw".

A la par, decidimos realizar unos calendarios para recaudar dinero y así poder financiar otro nuevo proyecto de bicicletas, aunque gracias al galardón "Bilbao Norte-Sur 2012" otorgado por el Ayuntamiento de Bilbao por la labor que habíamos realizado, decidimos utilizar ese dinero en la creación de una nueva escuela en un pueblo de nueva intervención.